Itinerarios turísticos
LA VUELTA AL HACHO
«Voy a dar la vuelta al Hacho» o «vengo de dar la vuelta al Hacho» son frases que se repiten cotidianamente entre los caballas porque pasear por la carretera que circunvala el Monte Hacho para hacer ejercicio y mantenerse en forma física, o simplemente por el placer de pasear, se ha convertido en una costumbre y una tradición en Ceuta.
El monte Hacho tiene una altura de 204 metros y está coronado por la Fortaleza del mismo nombre, que es una de las referencias visuales más características de la ciudad, tanto de día como de noche.
La carretera que circunvala el Hacho tiene un carril peatonal de 6 kilómetros de longitud, dotado de barreras de metal o quitamiedos e iluminación, para que se pueda caminar con total seguridad. El paseo dura aproximadamente una hora y media.
Este carril peatonal que, todos los días, permite dar la vuelta al Hacho a un gran número de ceutíes, ha sido posible gracias al esfuerzo y dedicación del arquitecto municipal Jose María Morillas Jarillo.
Iniciamos el recorrido en la Plaza de la Constitución que constituye un punto de encuentro habitual para muchos ceutíes. Desde aquí tomamos el Paseo de la Marina Española que discurre por la bahía norte y lo recorreremos íntegramente contemplando el Puerto, el Poblado Marinero y el Parque del Mediterráneo.
LAS BALSAS
Al final de la Marina Española nos encontramos con la zona denominada «Las Balsas», donde se encontraba el antiguo Hospital Civil de Ingesa, llamada así porque en este lugar se construyeron cuatro enormes depósitos o embalses en 1721 con el fin de abastecer de agua a la ciudad de Ceuta. Estos grandes depósitos estaban protegidos por dos garitas que, además de misiones de vigilancia, se utilizaban para «poner en capilla» a los reos condenados a pena de muerte.
EL PARQUE DE ARTILLERÍA
Justo después del antiguo Hospital, a nuestra derecha, nos encontramos con la Glorieta del Comandante Ayuso y el antiguo Parque de Artillería que, en la actualidad, se encuentra en estado de ruina, pendiente de demolición para construir el nuevo Cuartel de la Guardia Civil.
LA BARRIADA DE LA LIBERTAD
Seguimos nuestro camino por la costa hacia la animada y familiar barriada de La Libertad, presidida por un gran embalse, destinado a recoger el agua de lluvia, que se encuentra en buen estado de conservación, aunque actualmente no está en uso.
A nuestra izquierda, bajo el nivel de la calzada, podemos ver unas instalaciones artilleras de la segunda mitad del Siglo XIX que actualmente son utilizadas como viviendas.
LA FUENTE DE CARLOS III
Más adelante, a nuestra derecha, nos encontramos con una antigua fuente del siglo XVIII, con un escudo heráldico y una leyenda que dice: «Reinando Nuestro Señor Carlos III se hizo esta fuente por el Conde de las Lomas en 1788».
A la izquierda, quedan restos de la antigua muralla que protegía la batería que existió hasta principios del Siglo XX en ella podemos ver aún el estrecho pasillo que los vigilantes utilizaban para apostarse y observar, desde este lugar tan privilegiado, la entrada a la bahía norte.
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